Médico de la corte de Catalina II, escocés de nacimiento.

Fue leal a la emperatriz, lo que llevó a que muchos de sus coetáneos pensaran que además de tratar a Catalina II, elegía a sus favoritos. En 1786, le enviaron a Kronstadt para investigar las causas de muerte de los pacientes en los hospitales.

Rógerson acompañaba frecuentemente a la emperatriz durante su viaje al sur de Rusia.

En 1788 fue enviado a Revel para tratar al almirante Samuíl Greigh quien cayó enfermo.