Por Andréi Aleksándrovich Isérov

Doctor en Historia
Vicedecano de Gestión Internacional
Facultad de Humanidades
Universidad Nacional de Investigación “Escuela Superior de Economía”

Traducido del ruso por Daria Semionova
Revisado y corregido por Juan Pablo Duque Henao
Editado por José Escalona Briceño

Moiséi Samuílovich Alperóvich nació en Moscú, en el seno de una familia de refugiados judíos, proveniente de una devastada región en el Frente Occidental de la Primera Guerra Mundial: la ciudad de Dvinsk de la provincia de Vitebsk (actual Daugavpils, Letonia). Después de graduarse de la escuela y trabajar por un tiempo en la fábrica “El proletario rojo”, en 1936 ingresó en la recién restaurada Facultad de Historia de la Universidad de Moscú. Sus primeros pasos como historiador los dio en los seminarios de S. V. Bajrúshin (1882 – 1950) y V. V. Stoklítskaya-Tereshkóvich (1885 – 1962). Al principio, Moiséi Samuílovich quiso dedicarse a la historia medieval de Europa Occidental, aún más, llegó a publicar un trabajo al respecto, producto de su participación en el seminario de Stoklítskaya-Tereshkóvich[1]. No obstante, luego sus planes cambiaron: inspirado por las conferencias de Vladímir Mijáilovich Miroshévskiy (1990 – 1942)[2], incluidas en el curso de Historia de los países colonizadores y colonizados (o sea, tuvo la posibilidad de escoger la historia de pueblos asiáticos o africanos), el estudiante optó por una especialización romántica, la de América Latina, hecho que sin duda desagradó a Stoklítskaya-Tereshkóvich. Moiséi Samuílovich conocía este lejano continente[3] solo por las obras de Jack London, Rufino Blanco Fombona, José Eustasio Rivera, Bruno Traven y Ventura García Calderón (los cuentos de este escritor y diplomático peruano, casi olvidado hoy en día, quedaron plasmados en la memoria del joven Alperóvich). Es curioso que, en el futuro, en los años 1960 – 2000, Moiséi Samuílovich llegará a dedicar tanto tiempo al estudio de la obra de Francisco de Miranda y del Dr. José Gaspar Rodríguez de Francia, figuras que en su momento suscitaron gran interés en Miroshévskiy. 

Moiséi Samuílovich se enteró del comienzo de la guerra[4] en la sala de la Biblioteca Fundamental de Ciencias Sociales, donde él estaba preparándose para los exámenes de ingreso al doctorado. Recién graduado de la Facultad de Historia, en los primeros meses de guerra, construyó líneas de defensa cerca de la estación Snopot en la región de Briansk; después fue reclutado en el ejército, donde primero sirvió como apuntador de artillería y luego como traductor en la Subdivisión de Inteligencia. Moiséi Samuílovich finalizó la guerra con el grado de capitán, jefe del Departamento de Investigación de la Subdivisión de Inteligencia en el Cuartel General del 3er Ejército de Choque.  En mayo de 1945, participó en el interrogatorio del vicealmirante Hans-Erich Voss, quien reveló a las autoridades soviéticas información sobre el suicidio de Hitler y Goebbels[5].  

En agosto de 1946, Moiséi Samuílovich regresó a Moscú e ingresó al doctorado en el Instituto del Océano Pacífico de la Academia de Ciencias, donde a pesar de la lucha recién empezada contra el cosmopolitismo, en octubre de 1949 defendió su tesis “Revolución mexicana e imperialismo americano (1913 – 1917)”, realizada bajo la dirección de A. A. Guber (1949-1954). En 1949-1954, Moiséi Samuílovich enseñó en el Instituto Pedagógico de Riazán y desde el otoño de 1954, trabajó permanentemente en el Instituto Académico de Historia (desde 1968, Instituto de Historia Universal), siendo hasta su muerte miembro del Comité Examinador. En los años 60, hizo sus primeros viajes a México y a la revolucionaria Cuba. El propio Che Guevara  recibió a la pequeña delegación soviética de la que hacía parte Alperóvich. Así, de manera viva, conoció América Latina, sus archivos y bibliotecas[6].

Moiséi Samuílovich es autor de monografías fundamentales: “La Revolución mexicana 1910-1917 y la política de los Estados Unidos” (de 1958, en coautoría con B. T. Rudenko. La primera edición en español se público en México en 1960. Para 1984, iban ya en la número 12), “Guerra por la independencia de México (1810-1824)” (trabajo que fue publicado en 1964 y le sirvió de base para defender su tesis doctoral), “Revolución y dictadura en Paraguay (1810-1840)” de 1975 (publicada en polaco en Breslavia en 1981), “Francisco de Miranda en Rusia” (publicada en 1986 y , en español, en 1989)[7], “Rusia y el Nuevo Mundo (último tercio del siglo XVIII)” (1993), “Historiografía soviética de los países de América Latina” (1968; 1969, edición en español publicada en Caracas). También escribió docenas de artículos y la mayoría de ellos pueden ser considerados minimonografías[8]. Asimismo, el historiador formó parte de varias juntas editoriales y escribió capítulos para los libros “Ensayos sobre la historia moderna y contemporánea de México” (1960), “Ensayos sobre la historia de Brasil” (1962), “Ensayos sobre la historia de Chile” (1967) e “Historia de los EE. UU. Tomo 1 (1607 – 1877)” (1983).

Igualmente, Moiséi Samuílovich escribió manuales y libros de texto, a través los cuales generaciones de estudiantes se han familiarizado con la historia de América Latina: “La formación de estados independientes en América Latina (1804 – 1903)”, 1966 (en coautoría con L. Y. Slioskin); “El movimiento libertador a finales del siglo XVIII - principios del siglo XIX en América Latina”, (1966); “Historia Moderna de los países de  América Latina” (en coautoría con L. Y. Slioskin), 1970; “Hispanoamérica en lucha por la independencia” (1971); “El Nacimiento del estado de México” (1979); “Historia de América Latina (desde la antigüedad hasta el siglo XX)”, en coautoría con L. Y. Slioskin, 1981 (La edición revisada y completada fue publicada en 1991). Los últimos trabajos de Moiséi Samuílovich fueron capítulos sobre América Latina en los siglos XVIII y XIX para el IV y V tomo de la “Historia Universal”, editada en seis tomos por el Instituto de Historia Universal de la Academia de Ciencias de Rusia (2013, 2014).

Después de defender su tesis sobre la Revolución mexicana de 1910-1917 y de publicar la monografía basada en la misma, el historiador comenzó a investigar las luchas independentistas de Hispanoamérica. Su propósito era comprender los orígenes del destino de América del Sur, y él era consciente de que su libertad académica se vería coartada dedicándose tan solo al estudio del siglo XX. Moiséi Samuílovich se hizo coautor de un famoso artículo donde reconsideraban la postura del mismísmo Carlos Marx sobre Simón Bolívar: en su ensayo para la “Nueva enciclopedia americana” (1858), Marx, apoyándose en las memorias de los oficiales extranjeros, creó una imagen sumamente negativa del Libertador, la de un desgraciado militar que llega al poder en medio del levantamiento popular, un cierto epígono de Napoleón. Los historiadores soviéticos, en cambio, por extraño que suene, demostraron las limitaciones de las fuentes consultadas por Marx y, en consecuencia, el error de sus conclusiones. Este artículo fue determinante para que el pueblo soviético comenzara a percibir las luchas independentistas de Hispanoamérica como un movimiento libertador, como una revolución social[9].

América del Norte estaba incluida en el campo de interés de Moiséi Samuílovich desde que inició su tesis doctoral. Más tarde, el historiador publicaría de forma regular estudios tanto interamericanos[10] como puramente norteamericanos[11]. Desde la segunda mitad de los años 70, Moiséi Samuílovich dedicó cada vez más tiempo a los vínculos entre Rusia y el Nuevo Mundo. Producto de esta línea de trabajo son las obras relacionadas con: la visita de Francisco de Miranda a Rusia, los jesuitas durante los tiempos de Catalina II, la crisis de Nutka (1789-1790) y  colonización rusa de América. Así, el historiador se acercaba a su propia y “única historia de ambas Américas”. 

Los trabajos de Moiséi Samuílovich destacan por el análisis escrupuloso de las fuentes, el perfecto conocimiento de las mismas en varios idiomas (no solamente en español y portugués, sino también en alemán, inglés, francés, italiano) y por la atención a los detalles reveladores del tema elegido. El historiador fue ajeno a los esquemas y dogmas del marxismo soviético vulgar y y a ciertas interpretaciones contemporáneas de las “políticas de la memoria”. Él dijo: “... no es necesario aplicar criterios de progresividad ni de justicia (tampoco sus opuestos) a cada guerra, y mucho menos a la política exterior. Podemos encontrar en el pasado bastantes guerras, en el transcurso de las cuales hubo tantas tendencias contradictorias y mutuamente excluyentes, que incluso con ciertas salvedades y rectificaciones, es poco probable que ahora, en retrospectiva, podamos dar de ellas una apreciación inequívoca”[12]. 

Hasta los últimos meses de su vida, Moiséi Samuílovich transmitió, con la mejor disposición, su enorme experiencia y conocimientos enciclopedistas a las nuevas generaciones de investigadores, y compartió con ellos libros raros de su biblioteca. A pesar de llegar casi a los de Matusalén, el historiador se adaptó completamente a la vida moderna, por eso mucha gente lo admiraba. Moiséi Samuílovich murió tan solo diez meses más tarde que su esposa, Elena Efímovna Atakova-Akselrud, la mujer con la cual entrelazo su destino incluso antes de la guerra.

Moiséi Samuílovich fue condecorado con dos Ordenes de la Guerra Patria de 2.ª clase (1945, 1985) y otras dos de la Estrella Roja (1944, 1945). También con las siguientes medallas: “Por sus méritos en combate” (1944), “Por la conquista de Berlín” (1945) y “Por la Victoria sobre Alemania en la Gran Guerra Patria 1941-1945 (1945). Le otorgaron además  la Orden mexicana del Águila Azteca (1984) y la Orden venezolana Francisco de Miranda en su 1ª clase (1996). Cabe mencionar que fue elegido como miembro asociado de la Academia Nacional de Historia en Venezuela. 

 

[1] Alperóvich, M.S. (1941). Восстание ткачей в Кельне (1369–1371) [La insurrección de los tejedores en Colonia (1369 – 1371)]. Средневековье в эпизодах и лицах: науч.-поп. сб-к/ Под рук. и ред. В. В. Стоклицкой-Терешкович [La Edad Media en episodios y personajes: compilación científico-popular/Redacción  de V. V. Stoklítskaya-Tereshkóvich]. Мoscú,  p. 55-63.

[2] Vea: Kostornichenko V. N. (1998). У истоков отечественной латиноамериканистики: В. М. Мирошевский. [Orígenes de los estudios latinoamericanos a nivel nacional: V. M. Miroshévskiy]. Volgogradо: Volgogradskogo instituta, 120 p.

[3] Para los rusos, Latinoamérica es un continente, no una región del continente americano (N. del E.).  

[4] El autor se refiere a la Gran Guerra Patria, nombre con el que los rusos identifican el período de la Segunda Guerra Mundial comprendido entre los años 1941 y 1945 (N. del E.).

[5] Vea: (1992). От Москвы до Берлина [De Moscú hacia Berlín]. Археографический ежегодник. 1990 [Anuario arqueológico de 1990]. Moscú: Nauka, p. 290-295.; (2002) С лета 41 до весны 45 [Desde el verano del 41 hasta la primavera del 45. Revista Народное образование [Educación popular], № 4, p. 105-113.

[6] Moiséi Samuílivich cuenta acerca de su labor investigador en una serie de artículos: (1982). Notes of a Latin Americanist [Notas de un especialista en Estudios Latinoamericanos]. The Hispanic American Historical Review [Revista de Historia Hispanoamericana]. Vol. 62, № 3, p. 339-368; (1999). Размышления не только о ремесле [Reflexiones no solo sobre el oficio]. Американский ежегодник 1998 [Anuario Americano de 1998]. Мoscú, p. 281-307; (1998). Историк в тоталитарном обществе (историко-биографические заметки) [El historiador en la sociedad totalitaria (notas históricas y biográficas)]. Revista Одиссей: Человек в истории. 1997 [Ulises: hombre en la historia. 1997] Мoscú, p. 251-274.

Vea también: (1962). Поездка советских историков на Кубу и в Мексику [Viaje de los historiadores soviéticos a Cuba y México]. Revista Новая и новейшая история [Nueva y novísima historia].№ 3, p. 186-188.

[7] El libro sobre Miranda y su traducción al español fueron reeditados en el año 2010, con una lujosa tapa de cuero. Además, Moiséi Samuílovich publicó la traducción al ruso del diario que Francisco de Miranda llevaba durante su paso por Rusia. (Moscú, 2001).

[8] Entre ellos, los últimos en publicarse fueron: Южноамериканская диктатура в зеркале европейской печати 20–40-х годов XIX в. [La dictadura suramericana en la prensa europea de los años 20-40 del siglo XIX]; Пребывание Франсиско де Миранды в России в освещении прессы Старого и Нового Света (XIX-XX вв.) [La estancia de Francisco de Miranda en Rusia según la prensa del Viejo y el Nuevo Mundo (XIX-XX)]. Colección de 3 tomos Мифы и реалии американской истории в периодике XVIII-XX вв. [Mitos y realidades de la historia americana en los periódicos del siglo XVIII – XX]. Moscú, T. 3, p. 7-43, 45-86.

[9] Alperóvich, M. S.; Yermoláev, V. I.; Lavrétskiy, I. R.; Semionov, S. I. (1956). Об освободительной войне испанских колоний в Америке (1810-1826) [Sobre la guerra independentista de las colonias hispanas en América (1810-1826)]. Revista Вопросы истории. [Cuestiones de la historia]. № 11, p. 52-71 (Primera publicación en español en  Сuadernos de cultura. Buenos Aires, № 32, Noviembre de 1957, p. 32-63; traducción al inglés: The Bolívar of Marx Corrected en The Liberator, Simón Bolívar: Man and Image / Ed. by David Bushnell. Nueva York, 1970, p. 187-195; asimismo existe una traducción al chino).

Junto a los principiantes en Estudios Latinoamericanos, M. S. Alperóvich y S. I. Semionov (1929-2005), fueron coautores del artículo publicado en la revista de historia más importante de los tiempos soviéticos, el veterano del Servicio de Inteligencia, I. R. Grigulievich, (1913-1988) y el miembro del Departamento de Relaciones Internacionales del Comité Central (luego miembro del Instituto de América Latina de la Academia de Ciencias de la URSS y de la Academia de Ciencias Sociales adscrita al Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética), V. I. Yermoláev (1917-1974).

La opinión crítica en cuanto a Marx se convirtió en el canon de la historiografía soviética.

A propósito, V. I. Yermoláev asistió a la defensa de la tesis doctoral de M. S. Alperóvich, y sin éxito trató impedir su aprobación, argumentando que el autor no había revelado el carácter “limitado e inmaduro” de la Revolución mexicana de 1910-1917.

[10] Por ejemplo: (1975). Испанская Америка и война за независимость США [Hispanoamérica y la guerra de Independencia de los EE. UU]. Revista Новая и новейшая история [Nueva y novísima historia].№ 2, p. 73–87; (1976). Испанские колонии в Америке [Las colonias españolas en América]. Война за независимость и образование США  [Guerra de Independencia y creación de los EE. UU.]. Moscú: Nauka, p. 392–413.

[11] (1956). О деятельности американской дипломатии во Франции в 1870–1871 гг. [Sobre las actividades de la diplomacia americana en Francia en 1870-1871]. Revista Вопросы истории. [Cuestiones de la historia]. № 7, p. 110–115; (1961). США и Парижская Коммуна [EE. UU. y la Comuna de París]. Парижская Коммуна 1871 г. [Comuna de París 1871]. Moscú, Т. II, p. 404-419; (1971). Рабочее движение США и Парижская Коммуна [Movimiento de los obreros en los EE. UU. y la Comuna de París]. История Парижской Коммуны 1871 года [Historia de la comuna de París en 1871]. Мoscú, p. 724-735.

[12] De las intervenciones durante la discusión del informe de I. V. Bestuyzhev. (1969). “К анализу характера внешней политики и войн. Критерии прогрессивности и справедливости” [Sobre el análisis del carácter de la política exterior y las guerras. Los criterios de progresismo y justicia]. Историческая наука и некоторые проблемы современности: Статьи и обсуждения [Ciencia histórica y algunos problemas de la actualidad: artículos y discusiones]. Moscú, p. 419.